Una de las tareas fundamentales de todo emprendedor es empezar a ordenar sus finanzas.
Es claro que un emprendedor tiene que dividir su tiempo en desarrollar sus múltiples facetas dentro del negocio. Las nuevas formas de llegar al cliente han impulsado el crecimiento de los canales digitales como: las redes sociales, el desarrollo del ecommerce, las fotos, los videos; sin embargo, es imprescindible que el emprendedor tenga claro los números que necesita alcanzar para generar mayor rentabilidad como empresa, desarrollar hábitos financieros saludables y mantener un crecimiento sostenible.
Por ello, hemos preparado los siguientes tips que todo emprendedor necesita para mejorar sus finanzas:
Organiza la información financiera del negocio:
Determinar los ingresos, gastos, la utilidad y saber de dónde llega el dinero es la base de todo plan financiero. Conocer esta información te proporcionará un mayor alcance sobre los números de tu negocio con los que podrás proyectar diversos escenarios económicos.
Elimina gastos innecesarios:
Una vez organizada la información financiera, se hará más fácil identificar aquellas salidas de dinero recurrentes e innecesarias que solo afectan el rendimiento del negocio.
Separa tus finanzas personales de la empresa:
Fija un sueldo para ti como líder del negocio y no mezcles el dinero que administras de forma personal con el de tu negocio. Tampoco tomes dinero del negocio para tus finanzas personales, ni utilices tus tarjetas de crédito personales para tu negocio o viceversa.
Gestiona eficientemente tu tipo de cambio:
Si necesitas comprar o vender dólares para efectuar un pago o una inversión, el mejor tipo de cambio, sin duda, lo encontrarás en Rextie.com.
Elabora presupuestos y proyecciones:
En esta etapa debes definir los objetivos financieros del negocio, preparar el presupuesto mensual y con ello generar proyecciones de diversos escenarios.
De acuerdo a los objetivos planteados, estos puedan medirse en el tiempo establecido y determinar cuáles fueron alcanzados y que otros necesitan replantearse.
Establece políticas de pago:
Sí has negociado productos o servicios a crédito, es necesario planificar las fechas de cobro y gestionar a tiempo las cuentas por cobrar. Ten en cuenta que de no hacerlo, se convertirá en un gran dolor de cabeza con el cual tendrás que lidiar.
Explora nuevas oportunidades de inversión:
Con la rentabilidad generada estarás en la posibilidad de analizar nuevas oportunidades de inversión, como pueden ser: compra de acciones, bonos, invertir en Factoring (con la compra de facturas), o también incorporar nuevas unidades de negocio a tu empresa.
Identifica fuentes de financiamiento:
Si necesitas tener capital de trabajo o mantener mayor flujo de efectivo, existen varias opciones: los préstamos de entidades financieras regulares y el factoring, que durante los últimos años ha tenido un gran desempeño en las finanzas de las pymes.
Ante cualquiera de estas opciones es recomendable que realices un análisis sobre el costo de cada tipo de producto de financiamiento, realices un comparativo y elijas la opción que va de acuerdo a las necesidades del negocio.
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