La crisis energética mundial y su relación con el tipo de cambio

A nivel global se observa un incremento constante en el precio del petróleo, el gas y los derechos de emisión de dióxido de carbono . Esta condición está dejando estragos en la economía mundial la misma que se viene reactivando después de la pandemia del COVID19.

¿Cuáles son sus causas?

Las causas de las crisis son variadas: La alta demanda de energía tras la pandemia, las condiciones medioambientales a causa del cambio climático y la falta de desarrollo de las fuentes renovables en el mundo con lo cual la transición hacia el uso de energía renovable se vuelve lejano e insostenible con la alta demanda. En resumen, nos encontramos ante un escenario de alta demanda de petróleo, gas, combustibles y con una oferta que no llega a satisfacerla lo que encarece el precio de estas commodities.

¿Qué consecuencias trae consigo en la economía?

Las consecuencias de estas subidas de precios son: El impacto sobre el costo de la electricidad, el repunte de la inflación, cambios en la política monetaria de los Bancos Centrales y cambios en las decisiones de inversión hacia posturas más conservadoras.

¿Cuál es su relación con el tipo de cambio?

El efecto es proporcional a la dependencia de energía que tenga un país, para poder explicar la relación con el tipo de cambio (dólar-sol) debemos entonces situarnos a analizar la situación económica de EEUU. Hoy en día este país viene presentando problemas económicos importantes tales como la inflación, según el último reporte de Octubre presentó un incremento del 6.2% en este indicador , cifra no vista desde hace 31 años.

Una de las causas de la inflación es el aumento del precio de los combustibles, gas, petróleo puesto que ahora a las empresas les resulta más costoso producir por lo que tienen que vender sus productos a un precio más caro.

La inflación es uno de los principales indicadores de estabilidad económica y una subida intempestiva fuera de los rangos previstos por los Bancos Centrales nos advierte una posible crisis económica. La búsqueda de activos refugios como el dólar encuentran aquí un escenario favorable para su apreciación.